Sabes que te prometiste que nunca volverías a sentirte así en otros brazos. Y llega él. Con el mundo en su sonrisa. Y rompe la promesa. Vuelves a sentir lo mismo que has sentido antes. Pero ¿sabes qué?. No es lo mismo. Es mejor. Muchísimo mejor.
_No puedes llegar a imaginar el miedo que tengo.
Me miró. Como él sabe. Haciéndome temblar. Me abrazó.
_No voy a irme. No quiero irme. _susurró.
Fue más que suficiente.
Destino.
Precioso :) Me encanta, como siempre.
ResponderEliminarUn beso
Como siempre, me encanta.
ResponderEliminarLa espera se me hace eterna (para ver tu proxima entrada).
Un saludo!
Un clavo saca otro clavo :)
ResponderEliminarUn beso!
Holaa! me encanto tu blog te sigo =)
ResponderEliminarY espero verte por el mio
http://unaaficionadaavertesonreir.blogspot.com/
No me falles!
Un besito
Sonrie.
Es precioso!!
ResponderEliminarNunca hay dos amores distintos
:)
Las promesas están para romperlas...
ResponderEliminarPreciosa esta entrada! =)
escribes muy bien, y hay un texto que me ha dejado boquiabierta: Be mine, es precioso
ResponderEliminarte sigo :)
He leído durante mucho tiempo tu blog y ahora te sigo! Me gusta mucho como escribes.
ResponderEliminarPásate, te seguiré leyendo
http://ningungramoquenoseadetucuerpo.blogspot.com/
Hoooola!
ResponderEliminarEsto va a sonar un poco raro, jajaja pero me puedes pasar tu email para proponerte una colaboración en otro blog? :D
Un saludo ;)
Malditos Él y sus Sonrisas!
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