La observó durante unos segundos mientras ella mantenía la mirada fija en sus manos.
_Pues demuéstrale que tus intentos no son estúpidos. Demuéstrale que no siempre tiene por qué ser así.
Consiguió que le mirase a los ojos.
_Es absurdo, cruel y es así. Siempre es así. Por mucho que lo intente no va a cambiar. Es algo que he aprendido a raíz de todo esto.
Su rostro se endureció y la miró con indiferencia.
_Te estás consumiendo por él. Hazme el favor de respirar otra cosa que no sea su nombre. Empieza a ser patético.
_¿Y qué quieres que haga yo?
_No tienes que hacerlo tú. Déjame hacerlo por ti. _su mirada ardía por ella _Déjame ser quien busque el oxígeno cuando tú te canses de hacerlo. Déjame ser la razón por la que vives cada día.
Él sujetó las manos de ella con fuerza. Ella no supo qué pensar.
Nunca llegaré a entenderlo.
Un texto precioso... y con mucha razón.
ResponderEliminarUn saludito
Dios (L)
ResponderEliminarMe siento reflejada en eso.Que precioso (L)
Me ha encantado.
Besos de esos colores bonitos :)