_Podría decirte muchas cosas ¿sabes? Y ninguna se acerca lo más mínimo a explicar todo lo que siento.
Le observé curiosa. Él me sonrió, yo le devolví la sonrisa y me acurruqué más junto a él. Tenía mi nariz pegada a su cuello, inhalando su olor, preguntándome cómo era posible que hubiera vivido todos esos años sin él. Me abrazó con fuerza, apretándome contra su cuerpo. Acercó sus labios a mi oreja y susurró.
_Estaré aquí siempre.
Me estremecí ante sus palabras. Tan reales, tan perfectas, tan...suyas.
Quizás sí me importe.
wow
ResponderEliminargracias
ResponderEliminarEs precioso
ResponderEliminarSaludos ...azya...